sábado, 21 de julio de 2012

POR QUÉ CORREGIR SUS TEXTOS

El texto escrito requiere más cuidados que el oral, ya que va a ser nuestra vía de presentación al destinatario de manera permanente,  quien se hará una imagen de nosotros según nuestra capacidad comunicativa. De modo que hemos de hacer una labor concienciada si no queremos suscitar la reacción contraria en el que recibe un mensaje. La forma de escribir refleja nuestro desarrollo cerebral y madurez (independientemente de la edad física). Así, es posible que no nos tomen en serio, perdamos un trabajo, suspendamos una asignatura, no consigamos adherir un cliente o  desestimen nuestra novela si no somos capaces de expresarnos con propiedad.

Muchas veces los correctores informáticos son deficientes. Hay palabras que colocan como incorrectas sin serlas o meramente no tienen capacidad de identificar las connotaciones positivas o negativas de una expresión.

Para eso estamos los profesionales que ayudamos a corregir la ortografía, el estilo o la sintaxis.


CORRECCIÓN DE ESTILO

La corrección de un texto sobrepasa la mera sustitución de b por v.

Errores comunes en los documentos poco cuidados respecto a su estilo son, entre otros: las incongruencias de todo tipo (especialmente en el tono); mal empleo del registro lingüístico; la presentación de características erróneas de ciertos tipos de narradores en las novelas y relatos; uso de recursos vacíos; falta de unión entre el fondo y la forma; utilización de repeticiones, palabras comodín, adjetivación sin aporte significativo, redundancias, cacofonía, términos rebuscados.

Todo esto provocará que el destinatario no comprenda nuestro mensaje. Sólo le dará una mala imagen de nosotros.

CORRECCIÓN SINTÁCTICA

La sintaxis es fundamental tanto para hacernos comprender como para que el lector sepa descodificar bien un texto correcto. La sintaxis muestra la estructura y organización de nuestra mente. Cuanto peor es la sintaxis de un texto, más inmaduro resulta el emisor al destinatario. De ahí que tenga que ser bien atendida.

Realmente la sintaxis tiene también que ver tanto con el estilo como con la puntuación. Un documento mal puntuado, modifica el significado del texto, lo que puede traer problemas posteriores.

A la hora de hacer nuestras oraciones, hemos de tener presente muchos factores. Nuestra competencia lingüística hará que sean ya más o menos mecánicos. Entre dichos factores se encuentra la concordancia. Además hemos de tener en cuenta que no es lo mismo emplear coordinación, yuxtaposición o subordinación. Cada una posee su utilidad. De modo que hemos de atender a cuál es nuestra intención a fin de seleccionar correctamente una u otra composición sintáctica.

A esto se suma que en lingüística sí que el orden altera el producto. En consecuencia, hemos de volver a prestar atención a nuestra intención al escribir el texto; es decir, qué queremos conseguir del destinatario.

De igual manera tiene relevancia la extensión de las oraciones, de los párrafos (que no debemos olvidar encadenar) e, incluso, de la totalidad del texto.

Importante resulta también la sucesión de elementos en una enumeración, por ejemplo.

En definitiva, la sintaxis es un componente imprescindible a tener en cuenta a fin de pulir un texto.


CORRECCIÓN ORTOGRÁFICA

La ortografía es otro de los elementos básicos que dan una imagen nuestra al destinatario. Ésta debe ser lo más perfecta posible. El problema es que, a veces, nos fiamos de mecanismos informáticos que no siempre son veraces.

Resulta, por tanto, relevante hacer lo posible por presentar un texto correcto en este aspecto, ya que lo contrario puede suponer  el suspenso en una asignatura o tesis, la eliminación de un certamen literario o la pérdida de un cliente.

Sólo recuerde las mofas que tuvieron lugar a partir de errores en documentos de contextos oficiales como en el juicio de Camps.

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